En Alburqueque (Badajoz) podemos encontrar un ruinoso castillo que pasa desapercibido por encontrarse a unos 15 km al Oeste de esta población, pertenece a la comarca Sierra San Pedro-Los Baldíos y se le conoce como Castillo de Azagala, enclavado en la Sierra de Santiago. Su posición hace controlable el puerto de Azagala, la sinuosa Rivera de Albarragena, la Sierra de los Bueyes y ahora todo el embalse de la Peña del Águila más el territorio que queda al norte de la Sierra de Santiago. El lugar es espectacular, lo mismo que su fauna y flora. Desde sus ventanas y merlones de sus murallas es fácil ver con cierta asiduidad tres joyas aladas de nuestros cielos, El buitre negro, la cigüeña negra y el águila imperial ibérica.
Además de toda la extensa historia con la que carga el castillo y sus inmediaciones desde el S.XIII, podemos contemplar y deleitarnos en su interior con un "diario de la guerra civil" que se encuentra escrito y disperso por todas las paredes del castillo, casi no hay pared que no nos cuente algo escrito por los soldados que lo ocupaban.
Bandera de Mando del 301 Batallón bordada a mano. (Fotografía extraida de todocoleccion.net)Vista de la estampa de Ntra. Sra. la Sma. Virgen de Carrión. Patrona de Alburquerque (Fotografia extraida de todocoleccion.net)
En el castillo estuvo acuartelado el 301 Batallón de las fuerzas sublevadas en 1938, al menos la 1ª y la 2ª Compañía según leemos en los grafitis que los soldados dejaron publicado en las paredes.
1ª Compañía
2ª Compañía
En una de las paredes podemos contemplar este significativo dibujo, una Corona Real de la que emana a su alrededor un "resplandor divino" con las divisas: Moralidad, Lealtad, Valor, Diciplina. El autor escribe cada palabra dentro de dos renglones para que todas tengan el mismo tamaño, con buena caligrafía, pero no escribe la "S" de disciplina.
Algunos tenían cierta "sensibilidad poética", aunque el texto está incompleto deja ver la idea...:
Esto no deja de ser una interpretación pues no se lee bien y el tipo de letra es de la época contando con las faltas de ortografía que son frecuentes. Lo normal es que estos soldados no tuvieran una formación académica completa, a veces ninguna y aprendieran a medio leer y escribir mientras descansaban de sus faenas habituales.
Soldado con gorra cuartelera
Firmas en la puerta de subida a la torre de homenaje
Lista de la compra
calendarios y dibujos de zapatos.
Se da la circustancia que al salir ya del castillo encontramos una habitación que pasó desapercibida al entrar. Completamente cerrada y sin ventanas, excepto por una pequeña oquedad praticada en la pared lateral. Esta habitación se encontraba llena de calzados, decenas o quizás una centena de zapatos de todo tipo, de jornaleros, de vestir, de señoras, de tacón alto y bajo, de niños, zapatillas de paño, botas, botines... el montón que se esparcía desde el centro del habitáculo, esta visión nos produjo una angustiosa sensación de ahogo, lo que nos hizo abandonar de la estancia inmediatamente, a todos los presentes se nos vino a la retina ciertas imágenes vistas en películas de la 2ª Guerra Mundial.
Horarios DE Turno C
Tambien se encuentran grafitis de eventos importantes para estos soldados, aunque distantes de los lugares en que se desarrollaron los combates debieron de impactar entre la tropa.
OY ME REMPUJA