Muchos son ya los años que nos separan del final de la Guerra Civil, pero aun en la distancia hoy día es posible hallar restos, en este caso de munición real de esa confrontación en nuestra región extremeña. Esta bala de fusil en perfecto estado de conservación fue hallada en la ladera de la Sierra del Torozo, cerca del paraje conocido como Los Castillejos. Fue fotografiada en el mismo lugar donde se encontró. Como símbolo de tanta barbarie dejamos de recuerdo el hueco vacio de la bala, una herida que esperamos pronto esté curada y cerrada.
A pesar de ser reencontrada siempre será una bala perdida.
Continuará.